La curiosidad de los niños y niñas no tiene límites, ya que desde bien pequeñitos son científicos por naturaleza. Y es que les encanta experimentar y descubrir el mundo que les rodea con sus cinco sentidos. O seis. Entonces, ¿qué te parece si les ayudas a estimular esta cualidad, con estos curiosos experimentos caseros made in ALDI? Son lo más, pues no solo os regalarán momentos inolvidables en familia, también entrenaréis vuestras habilidades cognitivas, de observación, comunicación y, como no, de trabajo en equipo. ¡Que empiece la magia!
Hay una gran cantidad de experimentos divertidos para hacer en casa con niños. En ALDI hemos hecho una pequeña selección de los mejores. Te los detallamos a continuación:
Con este experimento casero te convertirás en Harry Potter, prometido. Para recrear esta ilusión óptica solo tienes que colocar una moneda sobre la mesa y encima un vaso de cristal transparente (vacío y con la boca hacia arriba). En lo alto del vaso pon un plato, de modo que la moneda solo sea visible a través de las paredes de este. Hasta el momento, la moneda estará visible al 100%.
No obstante, cuando retires el plato, viertas agua en el vaso hasta llenar unas ¾ partes de su capacidad y de nuevo, coloques el plato encima…se hará la magia. ¿Te imaginas lo que ha sucedido? Efectivamente, my friend, la moneda misteriosa ha desaparecido. Y sin conjuro de invisibilidad.
Recrear una erupción volcánica en medio del salón es posible. Toma papel y boli y anota todo el material que necesitarás para hacerla posible: cartulina, papel de periódico, cinta adhesiva, botella de plástico vacía de 1 o 1,5 l, tijeras, embudo, vinagre, bicarbonato de sodio, colorante alimentario, detergente líquido para vajillas, lápiz, plato, cuchara sopera y cucharilla de postre. ¿Lo tienes todo? ¡Sigue nuestro paso a paso!
Paso 1. Recorta la cartulina y dóblala en forma de cono. Debe ser lo suficientemente grande como para cubrir el cuello de la botella y bajar hasta algo menos de la mitad de la altura. Luego, sujétala con un par de trocitos de cinta adhesiva para que no se abra el cono.
Paso 2. Corta la botella en dos piezas. Para que te hagas a la idea, una irá desde el cuello hasta ⅓ de la longitud del recipiente. La segunda parte será la zona de la base. Acto seguido une bien ambos trozos con cinta aislante, de manera que obtengas como resultado una botella mucho más pequeña.
Paso 3. Añade papel de periódico a la figura de la botella y conviértela en un volcán. ¿Cómo? Decorándola con el cono de cartulina que has confeccionado previamente. Píntalo como más te guste.
Paso 4. ¡Empieza el show! En un recipiente incorpora la cantidad especificada de bicarbonato de sodio, el colorante y un poco de jabón para lavar los platos. Con cuidado, agita la mezcla.
Paso 5. Vierte la preparación anterior en el interior del volcán y, con la ayuda de un embudo, haz lo mismo con un buen chorro de vinagre. Retira rápidamente el embudo y observa bien lo que sucede. Fascinante.
La ciencia es como la magia. O la magia es como la ciencia. Sea como sea, los experimentos para niños son la excusa perfecta para que magia y ciencia se muestren en su estado más puro. Alucinarán.
Bajo unas condiciones adecuadas, algunos materiales sólidos pueden llegar a formar “cristales”. Lo más curioso de este experimento para niños es comprobar que todos los cristales de sal forman cuadrados o rectángulos con ángulos rectos de una gran precisión. Asombroso, ¿no?
Lista de material necesario: sal común, agua destilada, dos recipientes (por ejemplo, un par de vasos o las tapas metálicas de los botes de conserva), una cucharilla y una lupa. Ahora sí, que cobre vida este experimento infantil para hacer en casa. ¡A la de una, a la de dos y a la de tres!
Paso 1. Coge uno de los recipientes y llena 1/3 de su contenido con agua. Fácil.
Paso 2. Agrega tanta sal como admita el agua y remueve bien. #ALDIconsejo: cuando la sal deje de disolverse en el agua ya no hará falta que añadas más. Comprueba como una parte de la sal se disolverá, mientras que otra quedará depositada en el fondo del vaso. Ahora te toca esperar unos días, con el fin de que repose la disolución. Déjala sin tapar, en un lugar que no moleste demasiado.
Paso 3. Poco a poco irán apareciendo unas partículas sólidas en el fondo del recipiente, ¡los cristales! Obsérvalos con detenimiento con la lupa, que te vendrá genial para recrearte en esta maravilla científica.
Los experimentos con imanes son más magnéticos que nunca, ¿será porque están de moda? Tras este juego de palabras tan nuestro, te mostramos un experimento científico para enseñar cómo reaccionan los polos sin renunciar a un rato de diversión. Aprenderéis la lección.
Paso 1. Mete unos cascabeles en el interior de una botella de plástico (importante: que sea transparente) y llénala de agua. ¡Siguiente!
Paso 2. Anima a los más peques a deslizar el imán por la superficie lateral de la botella, realizando movimientos circulares, verticales y horizontales.
Paso 3. Comprueba como el imán atrae los cascabeles, a pesar de no tocarse directamente, y cuando lo separas estos caen al fondo precipitadamente. Puro magnetismo.
Si el arte y la creatividad corren por tus venas, te gustará saber que existen experimentos sencillos para hacer en casa que te permiten dar rienda suelta a tu imaginación.
¿Conocías el que te presentamos a continuación? A nosotros nos tiene robada la mente, más o menos al nivel de las manualidades de reciclaje que te mostramos hace un tiempo. Promete, ¿cierto? ¡Dale!
Lo que lees. Con este experimento para niños podréis diseñar vuestra propia plastilina, del color que más os guste. Y, lo mejor de todo, con ingredientes que tienes por casa.
Material necesario: 1 taza de harina de trigo, ½ taza de sal fina, 1/3 de taza de agua caliente, 2 cucharadas de aceite y, por último, pintura. ¿Manos a la masa?
Paso 1. Mezcla la harina con la sal y remueve bien. Vierte la pintura y el aceite en el agua caliente y agrega a la mezcla anterior, mientras continúas removiendo. #ALDIconsejo: si la pintura que tienes por casa es sólida, disuélvela previamente en agua.
Paso 2. Deja enfriar y, cuando haya pasado un tiempo prudencial, amasa con tus manitas hasta lograr la textura idónea: ni muy seca ni muy pegajosa. Si no queda a tu gusto, no impacientes, porque puedes modificarla vertiendo un poco más de agua o de harina y sal.
Paso 3. Ya tienes tu plastilina lista para una buena tarde de juegos en familia. Eso sí, para conservarla en perfectas condiciones te recomendamos que la introduzcas en una bolsa hermética y ¡al frigorífico!
¡Importante! Por mucho que los ingredientes los hayas sacado de la despensa de tu casa, esta plastilina no es comestible por nada del mundo.
>> ¿Tarde de lluvia? Créenos cuando te decimos que ahora no supondrá ningún problema. De hecho, ¿qué tal si aprovechas para pasar un rato mágico con tus peques? Seguro que les encantarán todas las manualidades fáciles que les hemos preparado con mucho love.
>> Y de paso, ahora que llega el nuevo curso, te recomendamos algunas de las actividades extraescolares que más triunfan entre los peques de la casa. ¿Un consejo? Hazlos partícipes, toma la decisión en familia.
Lo que lees. Con este experimento para niños podréis diseñar vuestra propia plastilina, del color que más os guste. Y, lo mejor de todo, con ingredientes que tienes por casa.
Material necesario: 1 taza de harina de trigo, ½ taza de sal fina, 1/3 de taza de agua caliente, 2 cucharadas de aceite y, por último, pintura. ¿Manos a la masa?
Paso 1. Mezcla la harina con la sal y remueve bien. Vierte la pintura y el aceite en el agua caliente y agrega a la mezcla anterior, mientras continúas removiendo. #ALDIconsejo: si la pintura que tienes por casa es sólida, disuélvela previamente en agua.
Paso 2. Deja enfriar y, cuando haya pasado un tiempo prudencial, amasa con tus manitas hasta lograr la textura idónea: ni muy seca ni muy pegajosa. Si no queda a tu gusto, no impacientes, porque puedes modificarla vertiendo un poco más de agua o de harina y sal.
Paso 3. Ya tienes tu plastilina lista para una buena tarde de juegos en familia. Eso sí, para conservarla en perfectas condiciones te recomendamos que la introduzcas en una bolsa hermética y ¡al frigorífico!
¡Importante! Por mucho que los ingredientes los hayas sacado de la despensa de tu casa, esta plastilina no es comestible por nada del mundo.
>> ¿Tarde de lluvia? Créenos cuando te decimos que ahora no supondrá ningún problema. De hecho, ¿qué tal si aprovechas para pasar un rato mágico con tus peques? Seguro que les encantarán todas las manualidades fáciles que les hemos preparado con mucho love.
>> Y de paso, ahora que llega el nuevo curso, te recomendamos algunas de las actividades extraescolares que más triunfan entre los peques de la casa. ¿Un consejo? Hazlos partícipes, toma la decisión en familia.
Si el arte y la creatividad corren por tus venas, te gustará saber que existen experimentos sencillos para hacer en casa que te permiten dar rienda suelta a tu imaginación.
¿Conocías el que te presentamos a continuación? A nosotros nos tiene robada la mente, más o menos al nivel de las manualidades de reciclaje que te mostramos hace un tiempo. Promete, ¿cierto? ¡Dale!
Los experimentos con imanes son más magnéticos que nunca, ¿será porque están de moda? Tras este juego de palabras tan nuestro, te mostramos un experimento científico para enseñar cómo reaccionan los polos sin renunciar a un rato de diversión. Aprenderéis la lección.
Paso 1. Mete unos cascabeles en el interior de una botella de plástico (importante: que sea transparente) y llénala de agua. ¡Siguiente!
Paso 2. Anima a los más peques a deslizar el imán por la superficie lateral de la botella, realizando movimientos circulares, verticales y horizontales.
Paso 3. Comprueba como el imán atrae los cascabeles, a pesar de no tocarse directamente, y cuando lo separas estos caen al fondo precipitadamente. Puro magnetismo.
Bajo unas condiciones adecuadas, algunos materiales sólidos pueden llegar a formar “cristales”. Lo más curioso de este experimento para niños es comprobar que todos los cristales de sal forman cuadrados o rectángulos con ángulos rectos de una gran precisión. Asombroso, ¿no?
Lista de material necesario: sal común, agua destilada, dos recipientes (por ejemplo, un par de vasos o las tapas metálicas de los botes de conserva), una cucharilla y una lupa. Ahora sí, que cobre vida este experimento infantil para hacer en casa. ¡A la de una, a la de dos y a la de tres!
Paso 1. Coge uno de los recipientes y llena 1/3 de su contenido con agua. Fácil.
Paso 2. Agrega tanta sal como admita el agua y remueve bien. #ALDIconsejo: cuando la sal deje de disolverse en el agua ya no hará falta que añadas más. Comprueba como una parte de la sal se disolverá, mientras que otra quedará depositada en el fondo del vaso. Ahora te toca esperar unos días, con el fin de que repose la disolución. Déjala sin tapar, en un lugar que no moleste demasiado.
Paso 3. Poco a poco irán apareciendo unas partículas sólidas en el fondo del recipiente, ¡los cristales! Obsérvalos con detenimiento con la lupa, que te vendrá genial para recrearte en esta maravilla científica.
La ciencia es como la magia. O la magia es como la ciencia. Sea como sea, los experimentos para niños son la excusa perfecta para que magia y ciencia se muestren en su estado más puro. Alucinarán.
Recrear una erupción volcánica en medio del salón es posible. Toma papel y boli y anota todo el material que necesitarás para hacerla posible: cartulina, papel de periódico, cinta adhesiva, botella de plástico vacía de 1 o 1,5 l, tijeras, embudo, vinagre, bicarbonato de sodio, colorante alimentario, detergente líquido para vajillas, lápiz, plato, cuchara sopera y cucharilla de postre. ¿Lo tienes todo? ¡Sigue nuestro paso a paso!
Paso 1. Recorta la cartulina y dóblala en forma de cono. Debe ser lo suficientemente grande como para cubrir el cuello de la botella y bajar hasta algo menos de la mitad de la altura. Luego, sujétala con un par de trocitos de cinta adhesiva para que no se abra el cono.
Paso 2. Corta la botella en dos piezas. Para que te hagas a la idea, una irá desde el cuello hasta ⅓ de la longitud del recipiente. La segunda parte será la zona de la base. Acto seguido une bien ambos trozos con cinta aislante, de manera que obtengas como resultado una botella mucho más pequeña.
Paso 3. Añade papel de periódico a la figura de la botella y conviértela en un volcán. ¿Cómo? Decorándola con el cono de cartulina que has confeccionado previamente. Píntalo como más te guste.
Paso 4. ¡Empieza el show! En un recipiente incorpora la cantidad especificada de bicarbonato de sodio, el colorante y un poco de jabón para lavar los platos. Con cuidado, agita la mezcla.
Paso 5. Vierte la preparación anterior en el interior del volcán y, con la ayuda de un embudo, haz lo mismo con un buen chorro de vinagre. Retira rápidamente el embudo y observa bien lo que sucede. Fascinante.
Con este experimento casero te convertirás en Harry Potter, prometido. Para recrear esta ilusión óptica solo tienes que colocar una moneda sobre la mesa y encima un vaso de cristal transparente (vacío y con la boca hacia arriba). En lo alto del vaso pon un plato, de modo que la moneda solo sea visible a través de las paredes de este. Hasta el momento, la moneda estará visible al 100%.
No obstante, cuando retires el plato, viertas agua en el vaso hasta llenar unas ¾ partes de su capacidad y de nuevo, coloques el plato encima…se hará la magia. ¿Te imaginas lo que ha sucedido? Efectivamente, my friend, la moneda misteriosa ha desaparecido. Y sin conjuro de invisibilidad.
Hay una gran cantidad de experimentos divertidos para hacer en casa con niños. En ALDI hemos hecho una pequeña selección de los mejores. Te los detallamos a continuación:
Al llevar a cabo actividades científicas en casa con los más pequeños, es crucial tener en cuenta ciertas consideraciones para garantizar su seguridad y el éxito del experimento.
En primer lugar, siempre debe haber supervisión de un adulto responsable durante todo el proceso del experimento. Esto ayudará a prevenir accidentes y asegurar que los niños sigan las instrucciones adecuadas.
En segundo lugar, es importante seleccionar experimentos apropiados para la edad y nivel de habilidad de los niños. Los experimentos deben ser seguros y adecuados para su comprensión, de modo que puedan participar de manera activa y sin frustraciones.
Antes de comenzar cualquier experimento, es esencial revisar la lista de materiales y asegurarse de contar con todo lo necesario. Esto evitará interrupciones innecesarias y permitirá que el experimento se desarrolle sin contratiempos.
Asimismo, explicar claramente las etapas del experimento y los conceptos científicos involucrados les permitirá comprender mejor lo que están haciendo y por qué ocurren ciertos resultados.
Por último, fomentar la experimentación y la creatividad es clave para mantener el interés de los niños en la ciencia. Animarlos a hacer preguntas, proponer modificaciones al experimento y formular sus propias hipótesis les ayudará a desarrollar habilidades científicas y su amor por el aprendizaje.
Siguiendo estas consideraciones, los experimentos caseros para niños serán una experiencia educativa, segura y emocionante que dejará una impresión duradera en su desarrollo intelectual.
La curiosidad de los niños y niñas no tiene límites, ya que desde bien pequeñitos son científicos por naturaleza. Y es que les encanta experimentar y descubrir el mundo que les rodea con sus cinco sentidos. O seis. Entonces, ¿qué te parece si les ayudas a estimular esta cualidad, con estos curiosos experimentos caseros made in ALDI? Son lo más, pues no solo os regalarán momentos inolvidables en familia, también entrenaréis vuestras habilidades cognitivas, de observación, comunicación y, como no, de trabajo en equipo. ¡Que empiece la magia!
La curiosidad de los niños y niñas no tiene límites, ya que desde bien pequeñitos son científicos por naturaleza. Y es que les encanta experimentar y descubrir el mundo que les rodea con sus cinco sentidos. O seis. Entonces, ¿qué te parece si les ayudas a estimular esta cualidad, con estos curiosos experimentos caseros made in ALDI? Son lo más, pues no solo os regalarán momentos inolvidables en familia, también entrenaréis vuestras habilidades cognitivas, de observación, comunicación y, como no, de trabajo en equipo. ¡Que empiece la magia!
Al llevar a cabo actividades científicas en casa con los más pequeños, es crucial tener en cuenta ciertas consideraciones para garantizar su seguridad y el éxito del experimento.
En primer lugar, siempre debe haber supervisión de un adulto responsable durante todo el proceso del experimento. Esto ayudará a prevenir accidentes y asegurar que los niños sigan las instrucciones adecuadas.
En segundo lugar, es importante seleccionar experimentos apropiados para la edad y nivel de habilidad de los niños. Los experimentos deben ser seguros y adecuados para su comprensión, de modo que puedan participar de manera activa y sin frustraciones.
Antes de comenzar cualquier experimento, es esencial revisar la lista de materiales y asegurarse de contar con todo lo necesario. Esto evitará interrupciones innecesarias y permitirá que el experimento se desarrolle sin contratiempos.
Asimismo, explicar claramente las etapas del experimento y los conceptos científicos involucrados les permitirá comprender mejor lo que están haciendo y por qué ocurren ciertos resultados.
Por último, fomentar la experimentación y la creatividad es clave para mantener el interés de los niños en la ciencia. Animarlos a hacer preguntas, proponer modificaciones al experimento y formular sus propias hipótesis les ayudará a desarrollar habilidades científicas y su amor por el aprendizaje.
Siguiendo estas consideraciones, los experimentos caseros para niños serán una experiencia educativa, segura y emocionante que dejará una impresión duradera en su desarrollo intelectual.
Hay una gran cantidad de experimentos divertidos para hacer en casa con niños. En ALDI hemos hecho una pequeña selección de los mejores. Te los detallamos a continuación:
Con este experimento casero te convertirás en Harry Potter, prometido. Para recrear esta ilusión óptica solo tienes que colocar una moneda sobre la mesa y encima un vaso de cristal transparente (vacío y con la boca hacia arriba). En lo alto del vaso pon un plato, de modo que la moneda solo sea visible a través de las paredes de este. Hasta el momento, la moneda estará visible al 100%.
No obstante, cuando retires el plato, viertas agua en el vaso hasta llenar unas ¾ partes de su capacidad y de nuevo, coloques el plato encima…se hará la magia. ¿Te imaginas lo que ha sucedido? Efectivamente, my friend, la moneda misteriosa ha desaparecido. Y sin conjuro de invisibilidad.
Recrear una erupción volcánica en medio del salón es posible. Toma papel y boli y anota todo el material que necesitarás para hacerla posible: cartulina, papel de periódico, cinta adhesiva, botella de plástico vacía de 1 o 1,5 l, tijeras, embudo, vinagre, bicarbonato de sodio, colorante alimentario, detergente líquido para vajillas, lápiz, plato, cuchara sopera y cucharilla de postre. ¿Lo tienes todo? ¡Sigue nuestro paso a paso!
Paso 1. Recorta la cartulina y dóblala en forma de cono. Debe ser lo suficientemente grande como para cubrir el cuello de la botella y bajar hasta algo menos de la mitad de la altura. Luego, sujétala con un par de trocitos de cinta adhesiva para que no se abra el cono.
Paso 2. Corta la botella en dos piezas. Para que te hagas a la idea, una irá desde el cuello hasta ⅓ de la longitud del recipiente. La segunda parte será la zona de la base. Acto seguido une bien ambos trozos con cinta aislante, de manera que obtengas como resultado una botella mucho más pequeña.
Paso 3. Añade papel de periódico a la figura de la botella y conviértela en un volcán. ¿Cómo? Decorándola con el cono de cartulina que has confeccionado previamente. Píntalo como más te guste.
Paso 4. ¡Empieza el show! En un recipiente incorpora la cantidad especificada de bicarbonato de sodio, el colorante y un poco de jabón para lavar los platos. Con cuidado, agita la mezcla.
Paso 5. Vierte la preparación anterior en el interior del volcán y, con la ayuda de un embudo, haz lo mismo con un buen chorro de vinagre. Retira rápidamente el embudo y observa bien lo que sucede. Fascinante.
La ciencia es como la magia. O la magia es como la ciencia. Sea como sea, los experimentos para niños son la excusa perfecta para que magia y ciencia se muestren en su estado más puro. Alucinarán.
Bajo unas condiciones adecuadas, algunos materiales sólidos pueden llegar a formar “cristales”. Lo más curioso de este experimento para niños es comprobar que todos los cristales de sal forman cuadrados o rectángulos con ángulos rectos de una gran precisión. Asombroso, ¿no?
Lista de material necesario: sal común, agua destilada, dos recipientes (por ejemplo, un par de vasos o las tapas metálicas de los botes de conserva), una cucharilla y una lupa. Ahora sí, que cobre vida este experimento infantil para hacer en casa. ¡A la de una, a la de dos y a la de tres!
Paso 1. Coge uno de los recipientes y llena 1/3 de su contenido con agua. Fácil.
Paso 2. Agrega tanta sal como admita el agua y remueve bien. #ALDIconsejo: cuando la sal deje de disolverse en el agua ya no hará falta que añadas más. Comprueba como una parte de la sal se disolverá, mientras que otra quedará depositada en el fondo del vaso. Ahora te toca esperar unos días, con el fin de que repose la disolución. Déjala sin tapar, en un lugar que no moleste demasiado.
Paso 3. Poco a poco irán apareciendo unas partículas sólidas en el fondo del recipiente, ¡los cristales! Obsérvalos con detenimiento con la lupa, que te vendrá genial para recrearte en esta maravilla científica.
Los experimentos con imanes son más magnéticos que nunca, ¿será porque están de moda? Tras este juego de palabras tan nuestro, te mostramos un experimento científico para enseñar cómo reaccionan los polos sin renunciar a un rato de diversión. Aprenderéis la lección.
Paso 1. Mete unos cascabeles en el interior de una botella de plástico (importante: que sea transparente) y llénala de agua. ¡Siguiente!
Paso 2. Anima a los más peques a deslizar el imán por la superficie lateral de la botella, realizando movimientos circulares, verticales y horizontales.
Paso 3. Comprueba como el imán atrae los cascabeles, a pesar de no tocarse directamente, y cuando lo separas estos caen al fondo precipitadamente. Puro magnetismo.
Si el arte y la creatividad corren por tus venas, te gustará saber que existen experimentos sencillos para hacer en casa que te permiten dar rienda suelta a tu imaginación.
¿Conocías el que te presentamos a continuación? A nosotros nos tiene robada la mente, más o menos al nivel de las manualidades de reciclaje que te mostramos hace un tiempo. Promete, ¿cierto? ¡Dale!
Lo que lees. Con este experimento para niños podréis diseñar vuestra propia plastilina, del color que más os guste. Y, lo mejor de todo, con ingredientes que tienes por casa.
Material necesario: 1 taza de harina de trigo, ½ taza de sal fina, 1/3 de taza de agua caliente, 2 cucharadas de aceite y, por último, pintura. ¿Manos a la masa?
Paso 1. Mezcla la harina con la sal y remueve bien. Vierte la pintura y el aceite en el agua caliente y agrega a la mezcla anterior, mientras continúas removiendo. #ALDIconsejo: si la pintura que tienes por casa es sólida, disuélvela previamente en agua.
Paso 2. Deja enfriar y, cuando haya pasado un tiempo prudencial, amasa con tus manitas hasta lograr la textura idónea: ni muy seca ni muy pegajosa. Si no queda a tu gusto, no impacientes, porque puedes modificarla vertiendo un poco más de agua o de harina y sal.
Paso 3. Ya tienes tu plastilina lista para una buena tarde de juegos en familia. Eso sí, para conservarla en perfectas condiciones te recomendamos que la introduzcas en una bolsa hermética y ¡al frigorífico!
¡Importante! Por mucho que los ingredientes los hayas sacado de la despensa de tu casa, esta plastilina no es comestible por nada del mundo.
>> ¿Tarde de lluvia? Créenos cuando te decimos que ahora no supondrá ningún problema. De hecho, ¿qué tal si aprovechas para pasar un rato mágico con tus peques? Seguro que les encantarán todas las manualidades fáciles que les hemos preparado con mucho love.
>> Y de paso, ahora que llega el nuevo curso, te recomendamos algunas de las actividades extraescolares que más triunfan entre los peques de la casa. ¿Un consejo? Hazlos partícipes, toma la decisión en familia.
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