Somos de disfrutar comiendo y, por lo tanto, de mancharnos. Esto es así. Porque los lamparones en la ropa nos humanizan. Y más aún cuando devoramos un delicioso plato de pasta u otras exquisiteces donde un buen sofrito de tomate es el ingrediente estrella. Y si no que se lo digan a los más peques de la casa. Qué placer da verlos comer espaguetis, ¿verdad? A pesar de ello, no podemos remediar echarnos las manos a la cabeza cuando vemos la camiseta llena de churretones de tomate frito. Horror.
Cero dramas, darling. En ALDI te enseñamos a quitar las manchas rebeldes de tomate frito con éxito, porque lo único que queremos es que te dediques a disfrutar de tus sofritos. ¡Sigue nuestros tips!
Que las manchas de tomate son complicadas en todas sus formas, texturas y sabores no es ningún secreto. El natural, el frito, el kétchup, el concentrado… Todos ellos tienen un mismo denominador común: es clave actuar a tiempo y de forma efectiva para que las manchas de tomate no queden tatuadas para siempre en una de tus prendas favoritas. Oh-My-God.
A continuación, te explicamos cómo tratarlas en función del tipo de tejido:
Si te has manchado ese suéter de algodón que te trae tan buenos recuerdos, lo primero que debes hacer es retirar el máximo de tomate con una cucharilla. Luego introduce la prenda en agua fría. Acto seguido, rocía la mancha de tomate frito con unas gotitas de agua oxigenada y, en caso de ser blanca, también puedes añadir un poco de amoníaco. Importante: si es de color, no.
¿Y si la ropa de algodón es de color? Emplea alcohol de farmacia (el de 96º) en vez de amoníaco. Recuerda que, cuanto antes realices todo este proceso, mejores resultados obtendrás. El tiempo juega en tu contra.
Prepara rápidamente una mezcla de leche y sal. La primera sustancia ablandará la mancha, mientras que la segunda actuará como un abrasivo natural cuando frotes el lamparón. Moja un trapito con este mejunje, frota la zona afectada y déjala secar. Después, lava la prenda en la lavadora, con tu programa habitual.
#ALDIconsejo: si el susto te lo has llevado con una prenda de seda, que no cunda el pánico. Mezcla un algodón con agua caliente y amoníaco o vinagre blanco y aplícalo sobre la mancha. No obstante, si esta ya se ha resecado te aconsejamos que pongas la ropa en remojo con agua fría y alcohol.
Los tejidos de lana hay que tratarlos de forma especial. En este caso debes utilizar ingredientes que tienes en tu despensa: limón y sal. Exprime el limón y diluye el zumo en agua. Luego añádele la sal, para que actué como abrasivo al frotar la mancha de tomate frito. Después, lava la prenda con agua y el jabón habitual (puede ser jabón casero) y aclárala con agua fría. Listo.
Como en todos los ejemplos anteriores es vital retirar el exceso de tomate frito de la ropa. Para hacerlo sin que se esparza la tragedia, usa una cuchara. Nada de servilletas o similares, es un error. Una vez que hayas actuado sobre los restos de tomate, empapa la mancha en agua con vinagre o bien en zumo de limón. Y frota la prenda con mucho cuidado. Sigue las instrucciones de lavado y se acabó el drama.
Como decía aquella famosa canción “No es lo mismo”. Porque no es lo mismo el tratamiento de una mancha en una prenda de algodón que en un tejido sintético. Y tampoco es lo mismo la ropa de color que la blanca. Por eso, ten en cuenta las siguientes especificaciones:
Si la prenda que se ha manchado es de algodón y blanca. Puedes recurrir a limpiar la mancha de tomate frito con un paño humedecido con agua oxigenada y unas gotitas de amoníaco. ¡Ojo! Si es de color, tal y como te hemos comentado anteriormente, sustituye el amoníaco por alcohol de farmacia (96º).
Si la prenda que se ha manchado es sintética y blanca. Te recomendamos que eches sobre la mancha de tomate frito un poco de jugo de limón o incluso de vinagre blanco, como prefieras. Deja actuar un cuarto de hora y enjuágala con agua fría (ya que estás leyendo esto, pásate por nuestro artículo sobre las medidas para ahorrar agua, el planeta te lo agradecerá). Termina el proceso introduciendo la prenda en la lavadora y usa el programa de lavado de siempre.
¿Qué ocurre si además de la ropa, manchas la pared? Parece exagerado, pero seguro que conoces a alguien que le ha sucedido alguna vez. Y si no, ese alguien eres tú. Dicho esto, si el tomate frito impregna la pared, haz una mezcla de agua tibia y vinagre. Después aplícala cuidadosamente sobre la mancha, con la ayuda de una bayeta. Deja que la combinación actúe y luego pasa un trapo limpio para eliminar cualquier residuo. Solucionado.
¡Por fin! Te compartimos el secreto que tanto estabas esperando. Para quitar las manchas de tomate del táper de tu oficina y no morir en el intento, lo primero que tienes que hacer es lavarlo con agua y jabón. Después, llena el recipiente con vinagre y déjalo reposar unos cinco minutos. Aclara y ¡como nuevo!
#ALDIconsejo: si lo remedios caseros no te convencen, ven a vernos, porque en ALDI contamos con una gran variedad de productos antimanchas que acabarán con cualquier tipo de suciedad. Bravo.
>> Tanto hablar de tomate, que nos han entrado unas ganas locas de cocinar. Y es que es uno de los ingredientes que más usamos en nuestro día a día, ya sea para elaborar salsas, guisos, mermeladas y otras muchas recetas. Por este motivo, ¿qué te parece si aprendes cómo hacer tomate en conserva de forma óptima? Después de este post, lo de las manchas de tomate ya no es ningún problema, ¿no?
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