Muchos recordamos a nuestras abuelas metiendo tarros de cristal llenos de comida en ollas ardiendo, y nos preguntábamos qué hacían. ¿Eran hechizos? ¿Rituales? Con el tiempo, descubrimos que no eran brujas, pues lo que hacían no era otra cosa que conservas al baño maría. Nuestras abuelas, con este método, conservaban los alimentos y guardaban las sobras durante mucho más tiempo. No tiraban nada de nada, ¡y bien que hacían!
Unas generaciones después, las conservas al baño maría siguen siendo uno de los métodos predilectos para conservar alimentos. Frutas, verduras, carnes, pescados, mermeladas, pastas, guisos, cremas… Así podríamos estar todo el día, porque la cantidad de productos que se pueden conservar con esta técnica es casi infinita.
Hoy te contamos todo lo que debes saber para aprender a hacer conservas al baño maría de la forma tradicional, tal y como hacía tu abuela. ¡Quédate y disfruta de esta masterclass!
Aunque años antes ya se había hablado del baño maría (o bain marie, pues esta técnica se la debemos a los franceses), no fue hasta el siglo XVIII cuando el cocinero Nicolas Appert descubrió que este método podía aplicarse en la cocina, concretamente en el mundo de las conservas. Se dio cuenta de que, si colocaba alimentos en un recipiente, los cerraba y los calentaba al baño maría, duraban mucho más. ¡Menuda sorpresa se llevaría!
Pero esta técnica no solo es útil para conservar alimentos, también sirve para calentar o trabajar a baja temperatura chocolates y otras cremas utilizadas en repostería, como hacemos nosotros en esta guía para hacer chocolate en casa o en estas cucharadas chocolateadas. Light no son, pero están requetebuenas.
Y ahora, al meollo del asunto: ¿cómo se hacen las conservas al baño maría? Te contamos el paso a paso para que no te quede ningún atisbo de duda.
Paso 1: Lava, desinfecta y seca bien los tarros de vidrio —no uses ningún otro recipiente que no esté fabricado con este material— y asegúrate de que el tapón cierre sin problemas.
Paso 2: Rellena los tarros con fruta, verdura, carne o cualquier otro alimento que quieras conservar y cúbrelo con el líquido adecuado, como aceite o almíbar. Este líquido variará dependiendo del alimento.
Paso 3: Cierra bien los tarros.
Paso 4: Sumérgelos en una olla con agua y llévalos a ebullición durante, al menos, 30 min. Con este paso conseguimos expulsar el aire y eliminar todos los microorganismos de los alimentos con un pH inferior a 4,6, como las frutas, encurtidos, mermeladas, etc.
Paso 5: Deja que tus botes en conserva se enfríen para que se cierren herméticamente y, luego, guárdalos en un lugar seco y poco iluminado. Te recomendamos que les anotes la fecha para hacerte una idea del tiempo que llevan ahí metidos.
¡Listo! Echa un vistazo a este artículo en el que te enseñamos a conservar tomates con diferentes técnicas, entre ellas el baño maría, para ir recogiendo ideas e ir haciéndote a esta técnica. Y disfruta de tus comidas favoritas durante más tiempo, ¡tal y como hacía la tua nonna!
Pues sí, tienes más de una opción para envasar tus conservas: en crudo o en caliente. Normalmente, estos métodos son más empleados para guardar las frutas durante más tiempo, aunque también se pueden aplicar a otros alimentos. En medio minuto te explicamos en qué consiste cada uno.
Antes de lanzarte a la aventura, debes tener en cuenta algunos aspectos para que todo el proceso salga según lo previsto. No queremos que tus tarros se rompan, que tu comida se escape del recipiente y se acabe esparciendo por todo el cazo o que tus conservas no se “conserven” adecuadamente. ¿Nos sigues? Pues pon en práctica estos consejos.
Es importante que los recipientes que utilices para tus conservas estén lo más limpios posible. Para ello, colócalos en el horno durante 10 minutos a unos 110 º o en una olla con agua hirviendo, y no te olvides de meter también las tapas. Ahora sí que sí: tus tarros ya están listos para su relajante baño maría.
Seguro que alguna vez has llenado una botella de agua hasta arriba, la has metido al congelador para llevártela a la playa al día siguiente y te has despertado con la sorpresa de que la botella ha explotado. Con las conservas al baño maría pasa algo parecido: cuando calentamos los tarros, los alimentos de su interior se expanden y pueden presionar el cristal hasta romperlo. Evítalo dejando al menos 2 o 3 cm de distancia entre el alimento y el cierre del recipiente. Mejor prevenir que curar, ¿no dicen eso?
El roce no siempre hace el cariño, darling… Cuando el agua hierve, tus tarros bailan dentro del cazo y se rozan entre ellos. Para impedir que uno de esos toques rompa el cristal y eche a perder tus planes de conservar esa mermelada que tan rica te ha salido, coloca un paño en el fondo del cazo y otro entre tus tarros. ¡Trucazo infalible!
Solo en nuestro país, cada hogar desperdicia una media de 65,5 kg de comida al año. Menuda barbaridad. En ALDI, nos preocupamos por este desperdicio desmesurado y, de vez en cuando, compartimos contigo tips para que ayudarte en la conservación de los alimentos incluso antes de comprarlos. Sin embargo, si ya tienes tus alimentos en casa y crees que van a caducar pronto, apúntate al movimiento de las conservas al baño maría. Además de conservar los alimentos en un estado impecable durante un máximo de dos años (¡Dos años!), los tarritos son aesthetic y muy instagrameables.
En ALDI también te damos multitud de consejos y recetas para tu día a día. ¡Echa un vistazo a todo lo que tenemos que contarte!
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