Descubre cómo hacer salmón ahumado en casa fácilmente

El salmón ahumado es un invitado de honor en cualquier mesa que se precie. Para que lo disfrutes en su máximo esplendor, te animamos a prepararlo desde la comodidad de tu cocina. Confía en ti, es mucho más fácil de lo que imaginas y, además, te guiaremos con nuestro sencillo paso a paso. También abordaremos algunas medidas sobre su correcta conservación, entre otras cuestiones.

Cómo lo degustes ya es cosa tuya, aunque no hemos podido resistir la tentación de ofrecerte algunas deliciosas recetas con salmón ahumado que van más allá del clásico canapé. ¿Te animas?

Si nuestra receta noruega de salmón marinado te ha robado el corazón, espera a probar el inconfundible sabor de un salmón ahumado hecho por ti en la comodidad de tu hogar. ¿Tiene algún secreto? Sí, reside en optar por un salmón de calidad (de eso ya nos encargamos nosotros) y de cocinar con mucho mimo. ¡Adelante!

• 1 kg lomo de salmón
• 400 g sal gorda
• 50 g azúcar moreno
• 1,5 g sal ahumada

¡Atención! Antes de empezar con la receta propiamente dicha, es muy importante que congeles durante dos días el salmón si lo has comprado fresco. No te la juegues con el parásito por antonomasia del pescado, el anisakis. Solucionado.

Por el contrario, si has optado por una pieza congelada, descongélalo. Sea como sea, deberás limpiar el pescado sí o sí y retirar las espinas cuidadosamente. ¡Listo!

Cocinitas, ponte el delantal, porque con este sencillo paso a paso serás capaz de elaborar un salmón ahumado de escándalo, digno del mejor restaurante con estrella. Y no, no exageramos. ¡Toma nota!

Paso 1. Como de costumbre, en ALDI siempre te aconsejamos que dispongas todos los ingredientes sobre la encimera. ¿El motivo? Muy sencillo, es la mejor manera de comprobar que no te falta ninguno. Ahora sí, ¿estás ready? En un cuenco mezcla bien la sal gorda, la ahumada y el azúcar moreno.

Paso 2. Cubre la base de una fuente con la mezcla que acabas de preparar. Acto seguido, dispón el salmón encima (recuerda que la piel debe ir hacia abajo) y, a su vez, cúbrelo por completo con la mezcla de sales y azúcar anterior. ¿Misión cumplida?

Paso 3. Tapa la fuente con papel film. ¡Importante! Para que el proceso de ahumado del salmón se realice correctamente, el film debe estar tocando la sal. Ahora toca prensar el salmón. ¿Cómo? Colocando algo de peso sobre la fuente (2 kg aproximadamente), por ejemplo, con un par de tetrabriks de leche o caldo bastará. Después, introduce el recipiente con el salmón en la nevera durante 36 horas. Eso sí, cada 10 o 12 horas más o menos tendrás que ir retirando el excedente de líquido del salmón.

Paso 4. Cuando hayan transcurrido las 36 horas, retira la mezcla de sal del salmón y fíjate si la textura te convence. Si bajo tu punto de vista, consideras que todavía le falta un pelín, mételo unas horas más en el frigorífico. A tu gusto. ¡Siguiente!

Paso 5. Tras dejarlo reposar, retira definitivamente la sal. Después corta el salmón ahumado en finas lonchas (por la parte ancha del lomo) con la ayuda de un cuchillo bien afilado. ¡A disfrutar!

El salmón ahumado casero, cuando se almacena correctamente, puede conservarse en la nevera desde 3 a 5 días aproximadamente. Es esencial mantenerlo refrigerado a una temperatura constante de 0-4°C para garantizar su frescura y sabor. Asimismo, no olvides introducirlo en un recipiente con tapa hermética o envuelto en film transparente para evitar que absorba olores no deseados. Lección aprendida.

Estás de enhorabuena. Sí, puedes congelar el salmón ahumado. Ahora bien, para hacerlo de forma segura existen algunas consideraciones relevantes que debes saber. Los alimentos solo deben congelarse y descongelarse una vez, pero el salmón ahumado es una excepción. ¿Cómo te quedas? En efecto, puedes volver a congelarlo siempre y cuando se haya descongelado de manera segura y no haya estado a temperatura ambiente durante mucho tiempo.

#ALDIconsejo: te recomendamos almacenar el salmón ahumado en porciones individuales, porque así facilitarás su uso futuro y garantizarás una calidad óptima al descongelarlo. ¿Clarinete?

El salmón ahumado es un alimento muy versátil, ya que se presta para ser disfrutado de diversas maneras. Y a cuál mejor. Por un lado, el salmón ahumado hace Navidad. Y es que es la estrella de más de un aperitivo navideño, convirtiendo cualquier canapé o tosta en una propuesta más atrevida, vistosa y repleta de contrastes. Aunque también resulta ideal como aperitivo para sorprender a los tuyos en cualquier ocasión, ya que es capaz de salvarte de cualquier imprevisto de última hora. Brillante.

Por otro lado, con el salmón ahumado se preparan un sinfín de comidas rápidas y sanas, tales como ensaladas gourmet, bocadillos healthy y otras recetas más elaboradas, por ejemplo, las pastas.

Amante del salmón ahumado, prepárate para hacer la lista de la compra, porque no podrás resistirte a nuestro top 3 de recetas con salmón ahumado. Brillan por su calidad, sencillez y sabor. Arrasarás.

En ALDI somos de romper con la monotonía, porque nos apasiona sorprender con nuevos sabores. Los mismos que te harán cerrar los ojos y exclamar un intenso “mmmhhh” de lo más sincero. Si, al igual que nosotros, eres de atreverte y probar, apuesta por esta combinación ganadora y añádele salmón ahumado a tu pasta favorita. Convertirás una receta cotidiana en un plato de restaurante. Y de cinco tenedores.

Para los amantes del salmón ahumado y el queso no hay comida o cena que pueda superar este plato. Palabrita de ALDI. De hecho, es una de las mejores recetas para hacer al horno, especialmente si tienes que organizar un buen festín de un día para otro. Además de su exquisito sabor, esta quiche de salmón ahumado tan aparente solo te llevará 1 hora de cocinado. ¿Alguien da más?

¿Tienes una cena o una comida especial? Hay combinaciones ganadoras y esta, claramente, es una de ellas: una tosta de salmón ahumado con un suave toque de cava. Suena bien y sabe mejor. Pero aún hay más, porque tendrás listo este canapé en un abrir y cerrar de ojos o, lo que es lo mismo, en tan solo 20 minutos. ¿Ya te hemos acabado de convencer?