Bonito vs. atún: cómo distinguirlos y usarlos en cocina

Bienvenidos/as a la batalla culinaria más sabrosa de los mares, donde el bonito y el atún se enfrentan en un duelo de sabor y textura. Si aún no has decidido quién protagonizará tu próxima aventura gastronómica, presta mucha atención a este práctico artículo, pues exploraremos las diferencias esenciales entre estos túnidos, desde su hábitat natural y sus características organolépticas hasta algunas recetas con las que venirse muy arriba. Y todo esto para que puedas elegir sabiamente en tu próxima visita a ALDI. ¡Al lío!

¿Atún o bonito? ¿En qué se distinguen? Entre los consumidores y amantes del buen comer, hay cierto desconocimiento sobre las diferencias entre ambas variedades de pescado azul. En ALDI lo aclaramos en las siguientes líneas, para que aparques las dudas de una vez por todas. ¡Allá va!

El atún y el bonito del norte, también conocido como atún blanco, provienen de la familia de los túnidos, dentro del pescado azul. A pesar de sus similitudes en cuanto a su origen, viven en hábitats completamente diferentes. De hecho, mientras el atún prefiere aguas más cálidas, el bonito se encuentra en zonas más templadas. No te acostarás sin saber una cosa más. ¡Siguiente!

Una de las diferencias más significativas entre el bonito y el atún son sus dimensiones. En este sentido, el bonito tiende a ser más pequeño que el atún. Otra característica muy distintiva de ambas especies es la forma de la aleta lateral. En el bonito esta aleta es notablemente más larga que la de otros túnidos, proporcionando una identificación visual muy clara. Así pues, fíjate en ella a la hora de identificar el ejemplar rápidamente. Pim, pam.

Elemental querido Watson. También hay diferencias muy evidentes en el sabor y la textura de ambos pescados azules. Por ejemplo, el bonito destaca por poseer una carne más sabrosa y una textura más suave. De hecho, su sabor es más apreciado en cocina por ser más exquisito que el atún.

Contrariamente, la carne del atún se caracteriza por ser más áspera y firme. Su perfil de sabor único puede caracterizarse por ser robusto, ligeramente salado, y en algunos casos, con matices ahumados.

Por último, ¿sabías que también existen variaciones de color entre el bonito y el atún? Por un lado, el primero presenta una carne de color más claro, con tonalidades que suelen inclinarse hacia los marrones claros. Por otro lado, el atún presume de tener una carne de un color marrón más pronunciado. Ficha esta pista visual, pues te será de gran utilidad a la hora de diferenciarlos.

>> Llegados a este punto, quizá te interese nuestro superpost sobre el valor nutricional del atún y todas las propiedades y beneficios que aporta. Sin duda, es un fuera de serie. Un aplauso, por favor.

¡Ojo! La diferencia de precio entre el atún y el bonito, al igual que sucede en la mayoría de productos, suele estar influenciada por varios factores, tales como la especie, la temporada de pesca, la región geográfica y la demanda del mercado. A pesar de ello, el atún tiende a ser más caro que el bonito, especialmente si se trata de variedades premium como el atún rojo. Dicho queda, my friend.

Tanto el atún como el bonito son dos pescados extremadamente versátiles en cocina. Desde ALDI, te mostramos cuáles son sus principales usos culinarios, para ayudarte a disfrutar de lo mejor de ambos. Seguimos con la intriga, ¿cuál será tu elección en tu próxima travesía culinaria? Sal de dudas.

• Sushi y sashimi: el atún es una elección muy popular en la cocina japonesa. Desde ALDI te contamos cómo preparar atún marinado para sushi o un tartar digno de la gastronomía nipona.
• Ensaladas: el rey de los azules se emplea en un sinfín de ensaladas frescas, especialmente en conserva, a menudo en combinación con vegetales y demás aderezos para ensaladas saludables.
• Platos a la parrilla o asados: la consistencia firme de la carne del atún lo hace ideal para cocinarlo a la parrilla o asado, proporcionando un sabor único y delicioso a tus platos.

• Conservas: al igual que el atún, el bonito es comúnmente usado en conservas, ya sea en aceite o en escabeche, resaltando su sabor suave y más delicado. Te sacará de un apuro en minutos.
• Platos de cocina tradicional: en regiones como el norte de España, el bonito se utiliza en platos de cuchara de la abuela. Sí, aquellos que pasan de generación en generación, como el marmitako o la ventresca a la parrilla. Todo un espectáculo culinario.
• Ensaladas y tapas: la carne clara y sabrosa del bonito es la opción estrella de muchas tapas fáciles y rápidas, del mismo modo que es clave para aportar un toque de proteínas a una ensalada.

Esta nutritiva ensalada de arroz, aguacate y tartar de atún está llena de contrastes tropicales. Y podrás disfrutarlos, en soledad o en compañía de los tuyos, desde el primer bocado. Esta sencilla preparación te teletransportará a un lugar exótico de ensueño en un pispás.

Cocinitas, nos atrevemos a gritar a los cuatro vientos que “jamás volverás a decir que la pasta integral es aburrida”. ¿Qué te parece? Y es que, combinando este tipo de pasta ecológica con bonito del norte y una salsa tan italiana como el pesto rojo, tu paladar no quedará indiferente. Viva la cocina mediterránea.

El tataki de atún es de esos platos que siempre se piden cuando están en la carta de un buen restaurante oriental. Pues bien, estás a punto de descubrir que puedes hacerlo desde casa, que es facilísimo y que, al contrario de lo que pueda parecer, es una receta apta para cualquier bolsillo. ¿Ya te has acabado de convencer?

Quizá por ensalada campera no te venga nada a la cabeza, pero si te decimos “ensalada de verano, de patata o española” seguro que se te iluminan los ojos y tu paladar se despierta. Una receta sencilla, que puede servirse como plato único si se completa con huevo duro o una conserva de atún, el plus de proteínas que necesitas. ¡Una delicia para toda la familia!

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