Grumete, hay dos grandes grupos de pescados: los azules (grasos) y los blancos (magros). Y es que ambos conceptos nacen con una finalidad muy clara, la de clasificar los distintos tipos de pescados según sus características. Ahora bien, la cosa se complica un pelín cuando nos preguntamos cómo saber cuál es cuál. Por ejemplo, ¿la merluza es un pescado blanco o azul? ¿Y el salmón? ¿Y qué decir del bacalao? ¡Sal de dudas y aprende a distinguirlos fácilmente! En ALDI solo te prometemos una cosa, con esta valiosa información te moverás como pez en el agua en la sección del pescado. ¡Al abordaje!
En este apartado remarcamos las principales diferencias entre el pescado blanco y el azul, para que puedas detectar sus rasgos con facilidad e identificar cada especie a la velocidad del rayo. ¡Toma nota!
¿Sabías que a simple vista puedes llegar a identificar rápidamente si un pescado es azul o blanco? Y es que la diferencia más significativa reside en su cola. Por un lado, el pescado azul tiene una aleta caudal con forma de C, es decir, arqueada. Y, además, sus extremos son afilados (como el de la fotografía).
En cambio, es tan sencillo como buscar una cola con una silueta redondeada, recta en su extremo y con un borde sin puntas para confirmar que se trata de un pescado blanco. Asimismo, el pescado graso luce unas tonalidades azuladas en su piel, cosa que no sucede con el blanco.
En cuanto a su interior, la carne del pescado blanco siempre presenta esta tonalidad. Por el contrario, los distintos pescados azules poseen carne de todo tipo de colores, en función de la variedad de la que se trate.
La diferencia básica entre ambas categorías reside en su concentración de grasa. De hecho, es el criterio más decisivo para situar cada especie en uno de los dos grupos. El pescado azul tiene más grasa que el blanco, en torno a un 8%, mientras que el blanco no suele superar el 3%. Llegados a este punto, es importante saber que, a pesar de que estemos hablando de grasas, son de buena calidad (es decir, son beneficiosas para nuestro organismo). Nos referimos a grasas poliinsaturadas, de la familia de los omega-3.
Los pescados azules o grasos manifiestan un aporte mayor en potasio, calcio, fósforo, vitaminas D, E y A y omega-3, debido al elevado contenido en grasas que te hemos comentado anteriormente. A su vez, los pescados blancos o magros ofrecen una relación muy equilibrada entre proteínas y calorías. También destacan como fuente rica en vitaminas del grupo B.
Dicho esto, es muy relevante destacar que ambas tipologías aportan todo tipo de vitaminas, proteínas y grasas saludables. Vaya, que no pueden faltar en tu dieta. Una merecida ovación al pescado, por favor.
#ALDIconsejo: el atún es la proteína del mar por excelencia y también es riquísimo en omega-3. Es por esta razón que hemos preparado este superpost del valor nutricional del atún y todo lo que aporta, en el que encontrarás alguna #ALDIreceta muy top y más de una curiosidad, que seguro llamará tu atención.
Los pescados azules, como el atún o la caballa, viven en aguas más frías y en las zonas más superficiales. Además, deben viajar grandes distancias para poder alimentarse y, por lo tanto, tienen un metabolismo más acelerado.
Por lo que respecta a los pescados blancos, como la lubina o la dorada, los podemos situar en las profundidades de los grandes océanos. Tienen un carácter más sedentario, por lo que no necesitan tanta energía para nadar, así que almacenan mucha menos grasa que sus compañeros azules.
El listado de los pescados blancos es muy amplio y son un tipo de alimento que no da gases.
En ALDI hemos seleccionado algunas de las especies magras más valoradas y consumidas en nuestro país: bacalao, besugo, corvina, dorada, gallo, lenguado, lubina, merluza, rape y rodaballo. ¿Ya las conocías? No te lo pienses ni un minuto e intégralos ya mismo en tu dieta. Tu cuerpo lo agradecerá.
En ALDI te presentamos las variedades de pescado azul para que las tengas en cuenta a la hora de comprar: aguja, anchoa o boquerón, anguila, arenque, atún, bonito, caballa, melva, cazón, pez espada, salmón, salmonete, sardina y trucha.
En esto no hay discusión alguna, tanto el pescado blanco como el azul son auténticas joyas para la gastronomía. De hecho, ¿cuántas recetas te pasan por la cabeza en las que estos manjares sean los verdaderos protagonistas? Ambas modalidades de pescado son exquisitas, aunque sí es cierto que también hay diferencias muy significativas en cuanto al sabor, color y aroma, que deberás tener en cuenta a la hora de cocinar una u otra receta.
Como siempre, si te falta inspiración, has llegado al lugar adecuado. Y es que hemos seleccionado las mejores #ALDIrecetas con pescados blancos: lubina al horno con verduras, patatas panaderas y vino blanco, bacalao con alcachofas y guisantes, bacalao con salsa de gambas, merluza en papillote, dorada al vino blanco, suquet de rape y cigalas y merluza a la gallega.
Y, como era de suponer, recetas con pescados azules: salmón sobre pastel de acelgas, salmón sobre arroz meloso de espárragos, pez espada a la cordobesa, salmón teriyaki, tataki de atún crujiente, tortitas de remolacha con trucha ahumada y ensalada de arroz con aguacate y tartar de atún.
Antes de finalizar el post, si quieres más platos deliciosos con pescado blanco y azul te animamos a “bichear” nuestras recetas de pescados y mariscos. La mar de buenas, palabrita de ALDI.
¡Ah! También te facilitamos nuestros tiempos en cocción en olla rápida para distintos tipos de pescado, pues nunca se sabe si el tiempo apretará y tendrás que usar tu gran aliado en la cocina: tu olla express.
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