Muchos de los productos non-food distribuidos por ALDI se fabrican en Asia, como por ejemplo, textiles, juguetes o muebles. Por este motivo, Hong Kong es la ubicación ideal para ALDI CR-Support Asia Ltd., que coopera estrechamente con el Departamento de Responsabilidad Corporativa (CR, por sus siglas en inglés) de ALDI Einkauf. El equipo supervisa los estándares laborales y sociales en los centros de producción.
El director de ALDI CR-Support Asia Ltd. es Christian Lohoff. A sus 36 años, no es la primera vez que Christian trabaja en el extranjero. Antes de unirse en 2013 a ALDI Einkauf, vivió dos años en Canadá. Esta experiencia le ayudó a establecerse rápidamente en Hong Kong. Lohoff es experto en Responsabilidad Corporativa en la cadena de suministro y dirige un equipo de 13 personas en esta sociedad creada en 2015. ¿Qué tiene de especial ALDI CR-Support? Que se centra exclusivamente en temas relacionados con la responsabilidad corporativa, como las auditorías. En la entrevista, Lohoff nos habla de su trabajo diario, los principales retos a los que se enfrenta en los centros de producción y por qué su estilo directo a veces incomoda en China.
Nuestro principal cometido es vigilar muy de cerca a los proveedores y los centros de producción, que designan nuestros proveedores. Para esto, en los últimos dos años hemos desarrollado un proceso propio: el ALDI Social Assessment o ASA (Auditorías Sociales de ALDI). En las inspecciones en los centros comprobamos, por ejemplo, si los salarios de los colaboradores cumplen la legislación vigente. La salud y la seguridad en los puestos de trabajo también son aspectos clave. Como director del equipo, trabajo principalmente desde mi despacho, mientras que mis compañeros realizan las auditorías directamente en las fábricas. Aun así, procuro visitar las fábricas de forma periódica porque es importante para comprender los retos a los que se enfrentan los centros de producción actualmente.
Antes de realizar las auditorías, hay que decidir qué centros de producción de nuestros proveedores son los que queremos visitar sin falta. En el sector textil, nuestro objetivo es visitar todas las fábricas con las que trabajan nuestros proveedores. Actualmente, en otros productos, como por ejemplo equipos electrónicos o muebles, nos estamos centrando en los proveedores más importantes para nosotros o en aquellos que implican un mayor riesgo. Una vez tomada la decisión, revisamos diferentes documentos en la oficina y valoramos toda la información que disponemos sobre los centros de producción. De este modo, determinamos los aspectos a los que debemos prestar especial atención en las visitas. El día de la auditoría, después de una primera entrevista, revisamos la contabilidad y los documentos importantes. Comprobamos de forma minuciosa si todo está en orden. La intensa comunicación y la estrecha colaboración con nuestros proveedores y centros de producción proporcionan una mayor transparencia a nuestras cadenas de suministro. Después de revisar toda la documentación, vamos a la fábrica. En la inspección comprobamos las normas laborales y sociales a partir de una exhaustiva lista de verificación. También hablamos directamente con los colaboradores en un espacio tranquilo. Al final del día, comentamos los resultados con todos los implicados, establecemos las primeras medidas y respondemos a todas las consultas sobre su aplicación.
Después de las auditorías se crean planes de medidas correctivas, si es necesario. En estos planes se detalla en qué ámbitos deben mejorar los centros de producción. Entregamos estos planes a los proveedores y, en un plazo de diez días, nos comunican cómo y en qué plazo realizarán las mejoras propuestas. Lo que ocurre después varía según el caso. En algunos casos, los proveedores nos facilitan fotos que demuestran que se han subsanado las deficiencias detectadas. Si se trata de temas especialmente críticos, visitamos las fábricas de nuevo. Para mí es importante que, en caso de detectar problemas, no cancelemos los pedidos de inmediato. Esto es así porque solo podemos mejorar la cadena de suministro si permanecemos atentos y buscamos soluciones conjuntamente. Si un centro de producción no satisface totalmente nuestras expectativas en aspectos críticos, deja de recibir nuevos pedidos. Así demostramos que vamos en serio.
En China el problema más frecuente es que los colaboradores realizan demasiadas horas extraordinarias. En algunos casos, los salarios y complementos, por ejemplo, del trabajo en fines de semana, no se pagan correcta o puntualmente. En Bangladesh nos centramos, sobre todo, en la seguridad de los edificios y la protección de la salud. Esperamos que nuestro trabajo en las instalaciones tenga un efecto a largo plazo y que genere una mayor conciencia sobre estos temas entre los proveedores y los centros de producción.
Es muy importante. Como miembros de amfori Business Social Compliance Initiative (amfori BSCI)*, participamos, por ejemplo, en encuentros regionales asiáticos sobre CR. Estos encuentros sirven principalmente para intercambiar experiencias y retos del trabajo diario con otras empresas. Después, transmitimos a nuestro departamento de CR de ALDI Einkauf los conocimientos prácticos que adquirimos en estos intercambios. Este departamento perfecciona, junto con otros miembros de amfori BSCI, el estándar para una cadena de suministro sostenible, y también facilita el trabajo a nuestros proveedores, que, de otro modo, tendrían que cumplir una gran variedad de requisitos distintos, en función del cliente.
Sí, sin duda, fue un cambio radical. Aquí, por ejemplo, no es habitual abordar los problemas directamente. Tienen miedo de quedar mal. Por eso, es mejor hablar con los colaboradores y socios de forma individual y expresar las críticas solo de forma indirecta. Por suerte, ya había trabajado en otro país y me gusta integrarme en nuevas culturas. Esto me ha facilitado la adaptación en Hong Kong.
No compramos productos non-food directamente en Asia: entre nosotros y los centros de producción están los proveedores. Éstos últimos designan fabricantes con diferentes centros de producción, que deben indicar ya en la oferta que nos presentan. Nuestro trabajo no consiste solamente en comprobar las condiciones en las fábricas. También sometemos a nuestros proveedores a un control exhaustivo antes de enviarles pedidos. ¿Qué conocimiento tiene el proveedor sobre los centros de producción? ¿Cómo está formada su cadena de suministro? ¿Está familiarizado con la Responsabilidad Corporativa? Preguntas como estas nos ayudan a determinar qué riesgos se asocian a un proveedor concreto. Las auditorías sirven para demostrar todo lo anterior: nos muestran si el proveedor conoce realmente la importancia de las normas laborales y sociales, y si ha elegido una fábrica que cumpla nuestros requisitos.
* amfori BSCI
La iniciativa amfori BSCI fue lanzada por amfori (anteriormente Foreign Trade Association – FTA) en 2003. amfori BSCI es una iniciativa de la industria y el comercio con la misión de garantizar unas condiciones seguras y socialmente justas dentro de la cadena de suministro.
ODS
GRI
En los nueve países europeos en los que estamos presentes trabajan personas de 117 nacionalidades. Esta diversidad forma parte de ALDI Nord, dado que enriquece nuestra cooperación a la vez que refleja la diversidad de nuestros clientes.
Organizamos nuestras actuaciones entorno a nuestros valores fundamentales: sencillez, responsabilidad, fiabilidad. Estos valores también definen lo que para nosotros significa el compliance del grupo ALDI Nord.
En todos aquellos ámbitos donde podemos influir, nos responsabilizamos para que se adopten unas condiciones laborales seguras y justas y se cumplan los estándares medioambientales.
Ser un colaborador de ALDI significa vivir según nuestros valores comunes: sencillez, responsabilidad y fiabilidad. En todo lo que hacemos y allí donde estemos.
La confianza de nuestros clientes es nuestro bien más preciado. Desde hace más de 100 años adaptamos nuestro surtido y servicio según las necesidades de nuestros clientes.
Asumir responsabilidad en la salud y la seguridad de los colaboradores en el lugar de trabajo forma parte de la identidad de las sociedades del Grupo ALDI Nord.
Somos conscientes de que en materia de bienestar animal queda mucho por hacer, pero vamos por el buen camino, como confirman dos publicaciones actuales sobre compromiso con el bienestar animal en la industria alimentaria.
Queremos que nuestros casi 69.000 colaboradores estén orgullosos de trabajar en el Grupo ALDI Nord. Por eso, ofrecemos puestos de trabajo estables, condiciones atractivas y perspectivas de desarrollo a largo plazo.
Asumimos nuestra responsabilidad en la conservación del medio ambiente y de sus recursos naturales. A este respecto, la reducción de residuos y nuestro compromiso contra el desperdicio alimentario juegan un papel muy importante para nosotros como cadena de distribución de alimentos.
